Jerarquías diocesanas y clero regular en el proceso de reforma eclesiástica (Río Cuarto, 1935-1948)
DOI:
https://doi.org/10.53439/revitin.2022.1.09Palabras clave:
reforma eclesiástica, obispado, orden franciscanaResumen
Con el propósito de reforzar y consolidar sus estructuras institucionales, la Iglesia católica emprendió desde mediados del siglo XIX un conjunto de medidas tendientes a centralizar y efectivizar la autoridad jerárquica sobre el clero y los católicos. Se destacó aquella que buscaba una adecuación de la estructura eclesiástica a la administrativa de los Estados y una mayor eficacia en el gobierno eclesiástico sobre los territorios. En consonancia con estas directivas vaticanas, a mediados de la década de 1930 la Iglesia argentina reformó su organización territorial y administrativa con la creación de nuevas diócesis y la elevación de algunas de las ya presentes a arquidiócesis. Aunque existe un amplio consenso en torno al carácter complejo y multimensional de estos procesos, no necesariamente ha implicado una proporcional proliferación de estudios que profundicen en su reconstrucción dentro de las distintas jurisdicciones diocesanas. En este sentido, en el presente trabajo nos proponemos analizar, desde una escala reducida, la implementación de estrategias tendientes a materializar la presencia de las jerarquías sobre los noveles territorios e imponer su autoridad al clero que le estaba subordinado. Centramos entonces nuestro análisis en las maniobras realizadas por el primer obispo de la diócesis de Río Cuarto, monseñor Leopoldo Buteler, en particular aquellas destinadas a diluir, absorber y/o reemplazar los lazos que tradicionalmente habían unido a la orden franciscana con la elite local, dando cuenta también de los distintos tipos de resistencias ensayados frente al avance del obispado y de cómo ambos se encontraron en estrecha vinculación con la vida política.